¿Por qué no hay sanciones en el Código de Ética?
Así como en la medicina es tan importante curar como prevenir la enfermedad, en la administración pública se debe controlar la corrupción, pero, sobre todo, prevenirla. Es preferible que las personas no caigan en la corrupción, que detectarla y aplicar sanciones.
La ética cumple ese papel preventivo, pues permite a las personas discernir con mayor claridad las consecuencias de sus decisiones y actos.
Por lo tanto, los Códigos de Ética no son instrumentos legales o disciplinarios, sino que ayudan a reflexionar y tomar decisiones sobre la forma de conducir la vida y desempeñar el cargo encomendado.
Como instrumentos éticos, no incorporan elementos punitivos o sancionatorios porque lo que “obliga” en ética no es la coerción o las posibles sanciones de un comportamiento contrario a un ordenamiento determinado, sino que es la misma persona la que se convence libre, voluntaria, racional y responsablemente de la importancia de mantener una conducta íntegra.
“Desde la perspectiva del derecho, la fuerza vinculante de la acción deriva de la coerción ejercida por las sanciones externas. Desde la perspectiva ética, nos referimos a las vinculaciones derivadas de la fuerza de convicción racional”
Domingo García Marzá